Vamos a seguir el curso de las aguas del río Tajuña que atraviesa este valle, formando un gran cinturón verde de naturaleza y frescor que podemos recorrer por la Vía Verde del Tajuña. Nosotros te proponemos que visites las poblaciones que se nutren y viven de sus aguas. Bonitos pueblos blancos colgados en laderas de olivos y encinas.

Estos pueblos tienen de todo: bonitos paseos y fiestas con solera. Se recomienda venir en Semana Santa para vivir las Pasiones Vivientes. Es una tierra rica en tradiciones y así lo reflejan los numerosos museos etnográficos, dedicados a las formas de vida del pasado. Y también es un territorio ideal para amantes del ciclismo, por la Vía Verde de Tajuña y la Vía del Tren de los 40 días, dos maravillosos recorridos, fáciles de hacer y llenos de belleza. El vino, el aceite y la repostería son los puntos fuertes de la gastronomía de esta ruta, y te recomendamos que vayas catando todas estas exquisiteces a lo largo de tú camino.