Carabaña, Valdaracete, Estremera. Tren de los 40 días o Vía Negrín
La Ruta de la Vía del Tren de los 40 Días es la que tiene mayor valor histórico y patrimonial de todas, además de un gran atractivo turístico para quien deseé conocer un pedazo más de historia de la Guerra Civil Española. También es conocida con los sobrenombres de, los Cien días y Vía Negrín. Fue construida por Juan Negrín López, presidente del Gobierno, y su ministro de Comunicaciones Transporte y Obras Públicas, Bernardo Giner de los Ríos, por decreto de 10 de mayo de 1937 y firmado por Manuel Azaña Díaz, presidente de la República.
El tren estuvo en funcionamiento desde 1937 a 1939 y su finalidad era unir las líneas de Madrid-Zaragoza y de Madrid-Levante, y para ello su trazado iba de Torrejón de Ardoz hasta Tarancón. Su utilidad fue, proveer de alimentos y armas a la capital de la República. Con las prisas con las que se hizo, el Tren de los 40 Días no podía dejar de tener algún defecto: los raíles eran chatarra recuperada de vías muertas; los túneles, angostos y sin ventilación, obligaban a pasar a toda marcha, so pena de que los maquinistas pereciesen intoxicados; y los desniveles eran tan fuertes, que los convoyes casi se paraban en cada cuesta. Una vez terminada la guerra, el ferrocarril dejó de tener uso y sus vías fueron desmanteladas en la década de los 40.
Hoy en día, este recorrido resulta muy fácil y agradable de realizar, por estar asfaltado todo el trazado y también, por estar libre de tráfico rodado (aunque hay que tener precaución en los cruces con carreteras). Resulta emocionante pasar por sus túneles y también por sus trincheras: caminos abiertos “a cuchillo” que atraviesan las colinas, y que ahora forman cortados por los que pasear, tanto a pie, como en bicicleta.
Longitud de Carabaña a Estremera: 15 km
Dificultad: media-baja
Más información: http://www.viasverdes.com/itinerarios/itinerario.asp?id=83
Villar del Olmo. Tren de los 40 días o Vía Negrín
El Ferrocarril de los 40 días pasaba por Villar del Olmo procedente de Torrejón de Ardoz. Después de mucho tiempo de olvido, su trazado ha sido recuperado para tareas de ocio y paseo. El camino discurre por la ladera del valle, pasa por varios túneles y cuenta con miradores y la posibilidad de conectar con otros caminos como la Cañada de las Merinas y la ruta de la fuente del Escurrizo, punto de parada y descanso para aplacar la sed de pastores y animales que recorrían la vía pecuaria. Ambas opciones ofrecen un magnífico catálogo de vistas y panorámicas del municipio. Otros tramos más irregulares y en los que los túneles están cerrados, recorren los municipios de Pozuelo del Rey y Orusco de Tajuña.
Longitud: 12 km
Dificultad: baja
Más información: http://www.villardelolmo.es/paginas/ruta-de-la-via-del-tren-de-los-cuarenta-dias